Una vez más ella rompe el esquema, camina tan bonita y mueve su belleza.

Ella se demoró apenas el tiempo necesario para decir el nombre. Lo buscó en las tinieblas, lo encontró a primera vista entre los tantos nombres confundibles de este mundo y del otro, y lo dejó clavado en la pared con su dardo certero, como a una mariposa sin albedrío cuya sentencia estaba escrita desde siempre.
Me gustaría vivir solo en palabras. Cobrar vida solo cuando alguien clave la vista en mi y simplemente desaparecer cuando no se me preste más atención. Quiero inmortalidad. Cual Martín Fierro, que va a vivir eternamente, siempre y cuando alguien lo reinvente en su imaginación, viviendo y muriendo al final de su relato. Yo, así, vendría a ser palabras. Pero pretendo ser palabras asentadas, no como esas que me recitabas tiempo atrás, que las envolvió el invierno y las arrastró consigo.
Planes de vida. De esos que se destruyen tan fácilmente como el corazón frágil de esta muñeca de cristal.
Vos mi razón, yo tu delirio. Vos mi voluntad, yo tu capricho.
Vos mi premio, yo tu lucha.
Vos mi predicción, yo tu intriga.
Vos mi calma, yo tu adrenalina.
Vos mi desintoxicante, yo tu droga.
Vos mi sorpresa, yo tu sueño.
Vos lo más sagrado, yo lo más deseado.
Andaba intentando resurgir de las cenizas cual ave fénix…
Nunca creí poder tener otra oportunidad,
Todo aparentaba a pasar de insoportable a insufrible,
Otra vez con mi positivismo a flor de piel…
Nadie creyó (ni yo) pero,
Estaba la vida tratando de demostrarme lo contrario.
Los llantos se perdieron y
Las sonrisas encontraron su rumbo.
Amor, otra vez, sinónimo de felicidad.
Y acá estas vos, uno en un millón, diría yo,
Ganando cada partida contra las dificultades,
Atacando crisis con paz,
Secando lágrimas y devolviendo vida,
Transitando kilómetros en mi nombre,
Obsequiándome momentos inolvidables, haciendo
Nacer esperanzas en este corazón que se creía marchito.
Hot and dangerous. If you’re one of us, then roll with us. ‘Cause we make the hipsters fall in love, and we’ve got hotpants on enough. And yes of course because we’re running this town just like a club. And no, you don’t wanna mess with us, got Jesus on my necklace. I’ve got that glitter on my eyes, stockings ripped all up the side. Looking sick and sexy-fied. So Let’s go!Tonight we’re going hard, just like the world is ours. We’re tearin’ it apart. You know we’re superstars. We are who we are! We’re dancing like we’re dumb. Our bodies go numb. We’ll be forever young. You know we’re superstars. We are who we are! DJ turn it up. It’s about damn time to live it up. I’m so sick of being so serious. It’s making my brain delirious
¿Acá? - No, me siento muy sola.
¿Allá? - No, rodeada de muchos y entendida por pocos.
Ni acá, ni allá. No pertenezco a ningún lado.
Sola hasta acompañada…  
Lágrimas de felicidad se escurren entre mis dedos mientras intento limpiar mi cara. La nostalgia me desborda y siento querer caminar hasta Rosario solo para abrazarte. Maravillosa sensación en la cual 'AMISTAD' reina sin ninguna barrera tiempo/espacio. Florencia Almada, te necesitaba tanto y aún después de esta charla, no dejo de necesitarte. TE-A-TE-I.



Siempre quise que mi nombre brille así. Nunca imaginé que pueda brillar en una campera. Mejor aún, TATI brilla a cada paso que doy. Exterioricé mi brillo interior, GLASEÉ MI BELLEZA.



Me he preguntado más que muchas veces que hubiera sido de mí si ustedes no hubiesen llegado nunca a mi vida...
No quiero que te enteres que te estoy hablando a vos. Voy a decirlo al viento y que te envuelva así el rumor. Y que en las noches al dormir te ronden los fantasmas y el miedo, que te hable tu conciencia y creas que haya sido Dios.

Ya no te quiero, no siento nada. Soy tan vacía como el silencio de tu cara. Ya no te quiero, estás marcado... Vos me enseñaste a dar silencio por amor. Yo quiero que te enteres que la gente ya escuchó que te cambió la suerte y que sepan lo que sos. Y sientas que en el aire hay algo frío dando vueltas y vueltas, que vivas presintiendo que algo malo te tocó. Ya no te quiero, no existe nada.  Ya no te quiero. Ya ni te odio. Vos me enseñaste a dar silencio por amor.
Miro mi interior y te reconozco - seguís ahí - en el rincón de mis esperanzas humedecido con ilusiones y con las telarañas de los sueños que no fueron.

Bajo la vista - seguís ahí - en el infierno de posibilidades inexistentes.

Subo la vista - seguís ahí - en todo mi cielo, en lo más recóndito de lo inalcanzable.

Miro hacia atrás – seguís ahí – escondido entre una maraña de recuerdos.

Miro hacia delante – lloro – ya no seguís ahí.
La melancolía de morir en este mundo y de vivir sin una estúpida razón.
  Sinceramente pienso que ‘vivir solo cuesta vida’ pero que no tiene sentido vivir solo por vivir. Cosa triste sería morir sin haber dejado nada que haya marcado tu paso por este mundo, ni una simple obra que recuerde que exististe.
 ‘No te mueras sin antes plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro’.
 Pero estar en este mundo porque sí, solo porque respiras y tus órganos funcionan como corresponden, porque te alimentas y bebes, eso, realmente eso, es tan triste que ni siquiera merece llamarse vida. Porque a la vida hay que vivirla y no sufrirla, antes que mala vida prefiero no tener vida.
 Prefiero vivir para amar y no morir de desamor, prefiero luchar por lo que quiero y no rendirme porque ‘es más fácil’, prefiero el camino largo lleno de obstáculos y emociones y no el corto sin sentido. Prefiero contradecirme incontables veces entendiéndome a mi misma y no pensar de forma colectiva. Prefiero los interrogantes y enfrentar la crisis. Prefiero pocos y buenos amigos a una multitud que poco vale la pena. Prefiero ser la antisocial y no estar fingiendo que la paso espectacular con gente que no me cae bien. Prefiero las nueces aunque sea más fácil el ruido. Prefiero que me cueste y llegar y no quedar en el camino por no intentar. Prefiero estridente a sobrio, decir a callar, escribir a leer. Prefiero afrontar el desafío CARPE DIEM. Prefiero ser la odiosa y no la  infiel a sus formas. Prefiero que me miren mal a que no me miren. Prefiero vivir para ver a quienes quiero sonreír y no morir para escapar de mis problemas. Y si lo bueno se hace esperar, prefiero esperar, aún desesperadamente y no conformarme con lo que se me entrega fácilmente y sin más complicaciones. Prefiero haber vivido lo malo para ahora disfrutar lo bueno y no haber estado siempre bien para sentirme constantemente ‘normal’. Prefiero no hacer todo lo correcto y aprender de mis errores. Prefiero lo abstracto a lo concreto, lo ideal a lo real, sentir a  mirar. Prefiero ‘mis toques personales’ aunque sean detestables. Prefiero que me detesten por ser así y no que me amen por mostrarme diferente. Prefiero horribles verdades a hermosas mentiras. Prefiero acumular razones para vivir y no razones por las cuales desear morir.
Conmigo siempre todo es una sorpresa. Yo me atrapo diciendo que me gustan cosas que jamás probé, o que nunca se me hubiera ocurrido probar. Me encuentro haciendo cosas que nunca se me hubieran cruzado por la cabeza. Me miento, me engaño y creo mis personajes. Nunca fui diagnosticada con desorden de personalidad… pero creo que eso fue un regalo de navidad de los médicos que me atendieron. Si no tengo desordenes de personalidad entonces abran las puertas del Borda y dejen a todos mis pares ser felices. Seriamente y aunque suene gracioso: tener varias personalidades te saca airosa de muchas situaciones dramáticas. Soy varias personas a la vez y varias personas que piensan muy diferente. Aún así, eso no me genera conflicto. No me contradigo: pienso diferente dependiendo de muchos factores. Todas mis personalidades conviven silenciosamente adentro mío y esperan su turno para salir. ¿De qué depende? ¿Cómo saben cuál de ellas tiene que salir? Bueno, ellas sí tienen las ideas claras y saben que cada situación merece una personalidad diferente, que se adecue, se amolde a las circunstancias vigentes.
Otoño, que me deprime.
Otoño, que me produce nostalgia.
Otoño, que me pone de mal humor.
Otoño, que me exaspera.
Otoño, que me hace sentir fea.
Otoño, marron.
Otoño, que me hace notar la inminente llegada del frio invernal.
Otoño, que me da fiaca.
Otoño, que odio.
Otoño, que quiero que termine.
(Y aun asi escuchar el crack-crack cada vez que piso las hojas que empapelan las calles me da un inmenso placer, se siente asi como si volviese a tener seis años. Y eso solo me lo regala el otoño, ninguna otra estacion del año).
Otoño, gracias.
Siento que ninguna idea fructifera puede emerger de mi materia gris en este estado de enamoramiento irremediable. No dejo de escribir(le) cursilerias y obviedades hasta el punto de releerlo y tener nauseas. Antes escribia ideas profundas- segun mi pensar -quiza las compartia o quiza las reservaba para mi, pero las tenia. Ahora no. Porque cuando estaba mal podia inspirarme con un sin fin de sentimientos: ilusiones/desilusiones, esperanzas/desesperanzas, miedos, ahogo, vacio, crisis, frustracion por querer tener lo que no podes tener, y ese querer se convertia en necesitar. Mis quieros siempre se acompañaban de un necesito desesperadamente. En cambio ahora mi unica ilusion es verlo, mi esperanza que pase la semana lo mas rapidamente posible y que el tiempo se detenga en sabados, mi miedo es perderlo, mi ahogo es saber que tanto bienestar no puede durar para siempre (cada vez que estas bien algo la caga), mi vacio se traduce en lunes, martes, miercoles, jueves, viernes y domingos, mi crisis comienza cuando lo necesito y esta lejos y mi frustracion es querer estar alla con el y en cambio estoy aca, solo conmigo. Y ahi esta otra vez, escribi algo cursi que llega a dar asco.
Necesito saber qu´´e mierda toqu´´e en el teclado para que las tildes me salgan as´´i, de a dos y sin poder ponerlas arriba de las vocales. Siento que ninguna palabra es la misma si no lleva su correspndiente tilde y hasta podr´´ia decir que me quita las ganas de escribir. Ya averiguar´´e.
Mañana, quiero que ya sea, porque es un reto m´´as. Estoy nerviosa, MUY. ¿Qu´´e tal ser´´an mis suegros? 
Quiero asentar algunas ideas por si en algún momento de mi vida, perdida entre ‘andá a saber qué’, cambio de parecer. Porque me di cuenta que en los últimos años mi vida fue una montaña rusa dentro del tren fantasma para luego transformarse en el país de las maravillas. Por lo cual, reconociendo que estoy muy propensa a cambiar continuamente sin perder lo que siempre fui, hay algunas ideas que pretendo no olvidar, NUNCA JAMÁS. En primer lugar mis múltiples perspectivas, mis pensamientos encontrados y la continua lucha entre el ‘quiero’, el ‘puedo’ y el ‘debo’. En segundo lugar mi poderosa imaginación, que aunque es el más valioso de mis tesoros, me lleva a darme cuenta de vez en cuando que lo real nunca es tan perfecto como lo ideal, lo que desemboca en grandes desilusiones. En tercer lugar, hablar solo con justificativos. Siguiendo con mi lista, quiero seguir opinando que la fidelidad es relevante y cuando termino de justificarme, rematar con un: ‘aunque también creo que meter los cuernos no significa desamor’, lo que siempre me lleva a una muy extensa explicación. Asimismo afirmar que la confianza es lo primordial en una relación, porque sin confianza no hay absolutamente nada. Voy a sostener que el amor siempre deriva en algún grado de locura y que si no estás preparado para eso, no estás capacitado para amar. Que me niego a arriesgar más de la cuenta, y a desistir de esperarte. Asevero que a veces bajar la cabeza ayuda a ser mejor y que a nosotros los humanos nos encanta creernos nuestras propias mentiras. Que me siento tentada a decirte ‘si, acepto’ y que aunque sé que tendré que vivir sin vos en un futuro muy cercano, no lo voy a aceptar tal como se me va a entregar. En cuanto a eso, nunca acepto nada tal como se me entrega, por eso cada tanto lo mejoro o lo transformo en lo peor jamás visto, un ‘toque personal’ diría yo. Pretendo que mi filosofía de vida me siga acompañando, para poder seguir creyendo que llorar no es muestra de debilidad, que todos somos ignorantes ignorando cosas diferentes, que mi estilo es un mix de mis alter egos, que lo malo es lo único que te hace ver lo bueno, que solo te entiende el que pasó por una situación similar a la tuya y que muchas palabras duelen más que el mayor de los golpes físicos, que si me voy a enojar tenga en claro que es para modificar algo, porque si no es así directamente no tengo que enojarme porque me lleva doble esfuerzo y que en una pelea pierden todos los involucrados. De todo corazón me deseo a mi misma jamás olvidarme de esto, y por si acaso, lo dejo escrito así puedo releerlo en momentos de escepticismo.